Dedicatoria:
Este "análisis comparativo"
entre lo que es la vida de una amante enamorada y la de una esposa infeliz, se
lo dedico a todas aquéllas mujeres de bien y de buen corazón y espíritu que,
por circunstancias de la vida, no han podido ocupar el papel de esposas, pero
que han vivido entregadas toda o parte de sus vidas a contribuir a la felicidad
de un hombre verdaderamente infeliz que, simplemente, se equivocó al escoger su
pareja "para toda la vida". No las dedico, y eso es evidente por el
contenido, a las "falsas amantes", aventuras de un momento, de
algunas noches, que sólo están con un hombre casado para lamentablemente
aprovecharse de su condición económica o de "hombre infeliz". Mi
respeto más profundo a aquéllas buenas esposas que luchan por mantener a toda
costa el amor del hombre que aman y que han caído en manos de estas últimas...
La
autora.
La amante... es la fortaleza... el
pecado que trae a la vida de un hombre que no se siente feliz... una nueva
ilusión para volver a amar...
La esposa... en cierta forma, es una
esclava que contradictoriamente exige que se le trate como a una reina... y se
ve a sí misma como un objeto de procreación y servilismo...
La amante... es ése alguien tan
especial que llega en el momento adecuado para ayudar a alguien a continuar su
búsqueda en la vida por todo lo que es hermoso... y disfruta inmensamente
haciéndolo...
La esposa... es simplemente una
compañera a la que uno se aferra porque las circunstancias de la sociedad lo
dictan... con la cual se comparte una vida de rutina y sin ilusión... hasta que
uno de los dos se cansa de la superficialidad en que se vive...
La amante... es aquélla que muestra y
comparte sus sentimientos y emociones con más pasión e intensidad... sintiendo
una insaciable sed por demostrar su amor dando siempre lo mejor de sí misma...
con autenticidad... con espontaneidad... en forma genuina... quizás porque no
tiene nada que perder...
La esposa... es aquélla que al
principio amó, pero que con el tiempo su amor disminuyó, Particularmente,
cuando ha perdido el respeto y admiración por el hombre que amó, su vida íntima
va degenerando en una relación de "obligación" que es falsa... donde
ya no existen verdaderos sentimientos de unión y, mucho menos, de una entrega
absoluta...
La amante... jamás se cansa de estar
con el hombre que ama... de escuchar lo que tenga que decir... de compartir sus
problemas, inquietudes y preocupaciones... Los amantes pueden disfrutar de tan
poquito tiempo juntos que son los que se proponen vivir cada instante de su
relación aprovechando al máximo cada minuto compartido.
La esposa... la mayoría del tiempo está
tan cansada de su marido, que disfruta aún más de los momentos en los que no
está con él...
La amante... encuentra su placer en la
felicidad de un segundo... un minuto... una hora compartida con su pareja...
La esposa... quizás haya pasado toda
una vida al lado de su marido... y no se dá cuenta de los posibles momentos de
felicidad que ha desperdiciado... no es capaz de brindarlos... y, mucho menos,
de saber o querer compartirlos...
La amante... siente profundo
agradecimiento por cada momento, cada rato, cada día, cada noche que su pareja
le regale.
La esposa... piensa que se merece y
exige - sólo por el derecho de tener un papel firmado - una vida entera
dedicada a ella...
La amante... es aquélla que siempre
pone en primer lugar al hombre que ama, y ella y todo lo demás permanece en
segundo término...
La esposa... es la que piensa siempre
primero en sí misma... después en su familia y en el mundo que la rodea... y,
al final, en su marido...
La amante... es la que ama o rechaza
intensamente... a plenitud... no conoce términos medios... no le teme a nada y
es capaz de ir a grandes extremos para hacer plenamente feliz al hombre que
ama... es la que es capaz de aceptar grandes retos y sufrimientos causados por
la ausencia, la distancia, las separaciones... siempre y cuando esté segura de
que no ama en vano y sienta su amor correspondido con la misma intensidad...
La esposa... es capaz de fingir amor o
afecto por su marido con tal de seguir viviendo un presente cómodo y sin
preocupaciones... es la que puede vivir eternamente al lado de u hombre al que
ya no ama, sólo por el temor de no poder enfrentarse con la incertidumbre de un
futuro desconcertante y desconocido...
La amante... no "exige"
amor... se contenta y es feliz con lo poco o mucho que recibe... siempre
buscando dar aún más que su otra mitad... le gusta ser y disfruta siendo
simplemente mujer, compañera, amante, enfermera, psicóloga; dulce, paciente,
entregada, comprensiva, generosa... sabe cuándo tiene que hablar... cuándo
permanecer callada... conoce lo que su pareja necesita con sólo mirarlo a los
ojos...
La esposa... puede pasar su vida
luchando y exigiendo ser amada... pero no hace nada por merecérselo...
generalmente se preocupa más por recibir que por dar... desconoce o no quiere
reconocer el significado de todo lo que es capaz de dar una amante... y, mucho
menos, no está dispuesta a darlo... ya no le interesa saber lo que su marido
necesita... sólo piensa lo que ELLA le hace falta...
La amante... nunca se queja... sus
lamentos son silenciosos... uno de sus placeres más grandes es llevar paz y
serenidad a un corazón cansado o herido...
La esposa... por tradición, o porque se
ha hecho costumbre, pasa su vida quejándose de cosas triviales... en continuo
estado de descontento y desamor...
La amante... ofrece comunicación
abierta; cuando se ha logrado una relación totalmente honesta, sin temores,
"máscaras" o artificios, expresa al hombre que ama todo lo que
siente, y se atreve a decir cosas que aún la esposa teme decirle ya sea por
miedo, intereses creados o conveniencia...
La esposa... generalmente bloquea una
comunicación franca y abierta por sus constantes actitudes de pleito, de
recriminación, y por falta de un genuino interés en los problemas y
preocupaciones de su marido...
La amante... es sincera, pero prudente
y medida... lo que menos desea hacer es herir... ni con sus palabras... ni con
sus actos...
La esposa... no se detiene a pensar en
las consecuencias de sus palabras o de sus acciones... se preocupa poco o nada
del efecto que las mismas pueden tener en su pareja...
La amante... es suave en su forma...
pero MUY FUERTE en sus esperanzas...
La esposa... es fuerte en su forma...
pero MUY DEBIL en sus esperanzas...
La amante... se siente con mayor
libertad... una gran ventaja para dar más abiertamente...
La esposa... se siente encadenada... es
sólo un objeto que simplemente se posee...
La amante... se tapa los ojos para no
encontrar defectos en su ser amado... sin embargo, tiene gran visión y amplitud
en sus conceptos de la vida...
La esposa... padece de ceguera para ver
la vida con realismo; es limitada en sus conceptos, pero posee gran facilidad
para la critica y para encontrar razones de queja y defectos en su pareja...
La amante... es más paciente y
discreta... la hacen sentir mal los pleitos... las discusiones; evita los
argumentos, mucho más los escándalos o momentos embarazosos... para ella, lo que
hace por amor va mucho más allá de lo que puede ser o no razonable... y siempre
encontrará una buena justificación para ello...
La esposa... se puede pasar la vida
discutiendo y peleando con su marido por una infidelidad, por ejemplo, aún
cuando en el fondo le importa poco... y reacciona negativamente sólo porque
siente que su seguridad está siendo afectada o porque su estilo de vida puede
cambiar si su marido la abandona...
La amante... siempre está deseosa...
amorosa... deseando acercamientos... lista siempre para recibir al hombre que
ama con los brazos abiertos...
La esposa... utiliza el sexo como un
arma o instrumento para obtener lo que quiere, de acuerdo a las circunstancias,
o según lo que le conviene...
La amante... su mayor gozo está en el
amor, afecto, necesidad y admiración que ella sea capaz de inspirar al hombre
que ama...
La esposa... la gloria para ella
estriba generalmente, y está sujeta, a los éxitos sociales, profesionales o -
mayormente - económicos de su marido...
La amante... entiende y acepta su
posición con verdadera dignidad, permaneciendo siempre a la sombra de los ojos
del mundo...
La esposa... se olvida de todo concepto
de dignidad mientras que pueda seguirse sosteniendo del brazo de un marido que
mostrar al mundo!
La amante... representa ese amor que -
por las circunstancias - tiene que ser negado y ocultado... es ese beso
apasionado, lleno de amor y entrega que no puede ser mostrado al mundo...
La esposa... representa ese amor
superficial, que aunque ya no exista, todo el mundo lo puede compartir y
conocer... un beso - que aunque frío y vacío - lamentablemente, sí se puede
mostrar abiertamente...
La amante... es ese nombre que no puede
ser mencionado... es la fruta prohibida que debe mantenerse escondida... es esa
pasión, inmensa, intensa, profunda, enloquecedora, que hay que guardar en
secreto, aunque quiera uno gritarlo al mundo...
La esposa... es un apellido que, aunque
sea llevado sin verdadero orgullo, puede darse a conocer en cualquier lugar...
es ese algo que, aunque no sea la fruta prohibida, es conveniente en ocasiones
ocultar o fingir para que el mundo no se dé cuenta del deterioro de la
relación...
La amante... es aquélla que siempre
tendrá una bienvenida cálida y amorosa para el hombre que ama... cada re-encuentro
es un algo tan especial para ella, lleno de gozo, de placer... tan
gratificante... tan placentero... de tanta entrega... que ese momento nada lo
puede turbar... solo piensa en la felicidad que ella puede aportar...
La esposa... es aquélla que usualmente
recibe en casa al marido con sus problemas, con sus preocupaciones, con sus
quejas, con sus recriminaciones, con sus exigencias... sin importarle nada cómo
se puede sentir él...
La amante... es aquélla que vive en un
sueño maravilloso, lleno de ilusiones que nunca se acaban, inventando siempre
algo nuevo que dar y compartir con su pareja...
La esposa... es aquélla que acabó con
sus sueños e ilusiones el día que sintió a su marido "seguro", o
atado a ella sólo por sus hijos...
La amante... es la que encuentra
inspiración en el hombre que ama para seguir creciendo... aprendiendo...
analizando la vida con más profundidad y realismo... tratando de convertirse en
un mejor ser humano... que encuentra gran satisfacción en este largo y complejo
proceso... y que no es capaz de negar o negarse nada que se haga en el nombre
del amor... por un amor... o para conseguir el amor del hombre que ama...
INCLUSIVE ACEPTAR CONVERTIRSE EN SU AMANTE!!!
La esposa... es la que está casada con
un hombre del cual la separa una triste y amarga distancia... que siempre se
sentirá menospreciada... y vive (aunque no le importe) bajo lo que ella siente
como una tiranía y "yugo" intolerable... es la que siempre le hará
sentir a él que lleva una cruel y pesada carga en sus hombros... un "castigo"
perpetuo... del cual no podrá desprenderse nunca, porque ella es la que tiene
"el papelito firmado en la mano"... es la que se resiste a todo buen
deseo o intención de convertirse en una mejor compañera, en una esposa más
preparada para enfrentarse a la vida juntos (por que éso está fuera de sus
límites de comprensión)... es la que se convierte en un freno para el
mejoramiento mutuo...; es la que impide la tranquilidad mental de su pareja, en
ocasiones hasta para su desarrollo profesional y crecimiento personal... es la
que no propicia un mejor entendimiento entre los dos (no le interesa)... es la
que se olvida del significado de las palabras "dignidad y decoro" con
tal de no perder su "status quo" dentro de la sociedad en que vive...
es la que puede vivir dentro de su mundo irreal o de fantasía "mirando
siempre para el otro lado" con tal de recibir "su cheque del
mes"... es la que acepta todo lo que le hagan para seguir teniendo
"el control" - aún en contra de todo principio de amor y de
"amor propio" -- y aunque ella haya sido la causa, HASTA INCLUSIVE
ACEPTAR QUE SU MARIDO TIENE UNA AMANTE!!!